Otras actividades
EXPOSICIÓN: El Madrid de Amalia Avia, Bretón y Falla
Exposición en colaboración con la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando
En torno a LOS AMORES DE LA INÉS / LA VERBENA DE LA PALOMA
Asociar la pintura de Amalia Avia con la escena, y en concreto con la zarzuela, es un gesto valiente que como poco invita a buscar los puntos en común entre ambas manifestaciones artísticas, y también las divergencias. En el caso actual hablamos de la propuesta que ha hecho el director teatral José Carlos Plaza al utilizar las imágenes de la pintura de Amalia Avia en la representación de las zarzuelas Los amores de la Inés y La verbena de la Paloma. La primera es una obra de juventud de Falla que desarrolla una historia ligera en un ambiente de taberna de barrio y toros. La segunda, de Tomás Bretón, seguramente la pieza más célebre del género, nos da la clave de lo que buscamos: la intersección entre estas zarzuelas y los cuadros de Amalia Avia no es otra que Madrid, la ciudad de Madrid. Y no es una intersección accesoria, porque en ambos casos Madrid juega un papel casi protagonista (...). Rodrigo Muñoz Avia
Fechas y Horarios
Del 19 de octubre al 10 de noviembre de 2013
Museo de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando
Sala 30
Horario: de 10:00 h. a 15:00 h. de martes a domingo (lunes cerrado)
Ficha Artística
Amalia Avia
Nace en 1930 en Santa Cruz de la Zarza, provincia de Toledo. Vive entre Madrid y el pueblo una infancia marcada por la guerra y la posguerra. Su carrera como pintora empieza en los años 50 en el estudio de Eduardo Peña en Madrid. En esos años empieza a conocer a muchos de sus amigos y posteriores compañeros de generación: Esperanza Parada, Antonio López, Julio López Hernández y sobre todo, Lucio Muñoz, con quien se casa en 1960. Su primera exposición tiene lugar en 1959 en la Galería Fernando Fe de Madrid. A partir del año 1964 pertenece a las legendarias galerías Juana Mordo y Biosca. Desde 1993 la Galería Juan Gris se convierte en la sede fundamental de sus exposiciones en la capital. Participa en numerosas exposiciones en torno al realismo español por todo el mundo, y en concreto sobre el grupo de realistas de Madrid: Antonio López, Julio López Hernández, María Moreno, Isabel Quintanilla, Francisco López Hernández... En 1992 se organiza una gran exposición en la Casa de las Alhajas de Madrid que, con el título “Otra Realidad: compañeros en Madrid”, recoge obra de esa generación de artistas que surge en torno a la Escuela de Bellas Artes de San Fernando, en la que también están representados pintores abstractos como Lucio Muñoz, Joaquín Ramo o Enrique Gran. La gran exposición antológica sobre su obra la realiza en 1997 el Ayuntamiento de Madrid en el Centro Cultural de la Villa. En ella se le concede la Medalla del Mérito Artístico del Ayuntamiento de Madrid. En 2004 publica sus memorias, "De puertas adentro", aplaudidas por la naturalidad de su escritura y por el relato de una vida llena de contrastes, con una infancia y primera juventud marcadas por la tragedia de la guerra, y una segunda etapa de su vida luminosa y feliz en el entorno del mundo del arte. Su pintura realista, nunca hiperrealista, afronta temas preferentemente urbanos, sobre todo de Madrid, ciudad desde siempre adorada por la artista. Son calles, fachadas, comercios, garajes: lugares en general desgastados por el tiempo, en ocasiones viejos y desconchados, donde la pintora coloca su particular mirada. Sin mucha presencia del color, Amalia Avia hace la crónica en gris de una ciudad que se está perdiendo, rincones que todos vemos pero en los que a lo mejor no nos fijamos. De su pintura, inicialmente más social, han ido progresivamente desapareciendo las figuras humanas. También, en algunas épocas, han sido frecuentes los interiores. Camilo José Cela la denomina la pintora de las ausencias, la amarga cronista del "por aquí pasó la vida", y Francisco Nieva habla de una melancolía barojiana refiriéndose a su pintura. Sobre su obra han escrito, entre otros muchos, Camilo José Cela, Francisco Umbral, Francisco Nieva, Juan Manuel Bonet o Francisco Calvo Serraller. Fallece en Madrid en 2011.